LA NATURALEZA DEL POETA MALDITO

Al hablar de un poeta maldito, tratamos un ensayo de Verlaine que encasilla a un grupo de autores denominados herméticos y genios, pero me parece que esa genialidad fue su maldición, de esta forma se alejaron del resto del mundo y tomaron los excesos como bandera de guerra, pero más allá de definiciones y estereotipos, yo creo que la poesía en sí debe ser una guerra contra el falso yo y así realizar actos subversivos a favor de la libertad poética, pero... ¿qué es más subversivo que la libertad misma?

La libertad en sí misma es quien le planta cara a la opresión artística ya que no hay nada más aberrante para la poesía, la religión, la política y la filosofía tradicional que una persona que crea su propio camino y sus propias ideologías, esa libertad de ir a donde quieras, hacer lo que quieras, tomar lo que quieras, liberar tus demonios y plasmarlos en prosas paganas fuera de toda norma, una catarsis para expiar demonios y venenos del alma. Así es como un poeta maldito comienza la labor misma de liberación espiritual, con actos de anarquía total, misma que la poesía es capaz de brindarte, siempre y cuando seas capaz de romper el mundo establecido y desnudar tu alma en un sincero y sobrecogedor verso. Y yo diría que ser un poeta maldito es:

Es tomar una pluma y una libreta y salir a recorrer el mundo sin un centavo en la bolsa, tomar tu camino y recorrer paisajes psicodélicos para así no llegar a la tumba lleno arrepentimientos, lleno de deseos incumplidos y de hipótesis sobre lo que pudo ser y nunca fue, y siempre ser fiel a ti mismo.

Es tener un incendio en el corazón y vivir como la mayoría no lo haría jamás, ser lo que la mayoría llama un “monstruo” para al final morir como un hombre sabio.

Es dejar que todo el universo arda en cada poema.

Es hacer de los locos tus amigos y sumergirte en sus fantasías, salir de allí y después enamorarte de la soledad, abrazarla y valorarla como un regalo venido del cielo, besar los labios de tu amante y sumergirte en sus deseos, tomar los tuyos y largarte de nuevo, seguir dando vueltas y seguir escribiendo, habitar en el infierno y pasar una temporada en él.

"LA NATURALEZA DE UN MALDITO"

Alguien alguna vez me dijo que lo verdaderamente importante venía de adentro, del corazón, he indagado en el asunto, y me di cuenta de que el corazón solo es un músculo mezquino, una bomba solamente, oxigena, nutre y distribuye sangre al resto del cuerpo y cuando algo falla se detiene y no más nada, no lucha, no siente, ni tampoco genera ningún sentimiento, solo un músculo estriado y nada más, entonces pensé detenidamente en el cerebro, el maestro regulador de todo, y caí en cuenta de que no somos más que una serie de mecanismos eléctricos que responden a los estímulos del medio ambiente para generar la producción de neurotransmisores, entonces lo que llamamos amor no es más que la baja producción de serotonina y el aumento de dopamina o la ausencia de esta última como causante de nuestro dolor espiritual y depresión emocional, así entiendo que lo que escribo no es más que la conjunción de estímulos eléctricos plasmados en papel, sin alma y sin sentimientos, mecánico y artificial como una máquina. ¿Entonces los poetas no fueron más que personas con problemas biológicos?. Pero... se bien que no. Se lo que dicen los ojos y sé que hay una chispa que arde dentro, que crea universos y explota en cada beso, y que te hace saltar para hacerte uno con el mar y llegar por fin al faro, que te hace hundirte en la bebida como fuente de inspiración y como frenta a la sociedad, morir y “No intentarlo”

Seguir ardiendo en preguntas, pasar 120 días y muchos más alimentando las llamas de la pasión, de lo que el resto teme decir, para ser encerrado, juzgado y aun así seguir bebiendo de las prosperidades del vicio.

Porque, lo que tenemos dentro es mucho más que sangre y tejidos biológicos, es convertirse en artesano de la letra, sembrar flores y alimentarlas del mal, llevarlas a la tumba de tu musa enferma, visitar gitanos en cavernas, viajar a los desiertos y danzar con la serpiente, refugiarte del sol y de tu espíritu humillado, tú, oh vampiro que has rogado a la espada por tu pronta libertad, tú que fuiste profano con tus letanías y que la muerte de los artistas es tu legado.

Así es como a través de lo imposible los sentidos llegan más allá de lo biológico y te vuelves un escritor de una extraña especie, una que vive de delirios, que siente más de lo que la naturaleza humana puede explicar, que se conecta con entornos naturales y se vuelve un alquimista del verbo, un maldito escritor…… un poeta maldito.

Por: Omar Michel