top of page
  • Anahí C. Rozas

El lanzamiento del desgarrador poemario de Sabrina Benaim


Sabrina Benaim ha publicado recientemente el libro: Depression and Other Magic Tricks (Depresión y otros trucos de magia), que aborda temas de salud mental (tabú para muchos), familia, amor y lucha. El libro incluye el poema "Explicándole mi depresión a mi madre", poema que fue recitado vía YouTube y que ha recibido muy buenas críticas, muchos aplausos, y más de 4 millones de visitas. Aquí el video de su poema recitado.

Sabrina es canadiense, tiene 29 años, es escritora, performance y profesora de arte en su país, pertenece además, al movimiento “Button Poetry”. Ha escrito poemas para ESPNW y el Gobierno de Canadá. Sabrina disfruta de romper paradigmas, de incentivar y apoyar a mujeres que ayudan a otras mujeres y por si fuera poco, acepta cualquier invitación a bailar ¿interesante, no?


Llegué a conocer el trabajo de Sabrina al leer el poema "Explicándole mi depresión a mi madre", poema que escenifica una conversación con su madre, en la que le explica su sentir frente a la enfermedad de la depresión, condición muy difícil de tratar para quien la padece debido a los prejuicios y a las banalizaciones, ella lo hace maravillosamente: intensa, real, cruda y a su vez conmovedoramente, en pocas palabras un poema “directo a la vena”. Vale la pena leerlo y más aún merece que su libro sea comprado, aunque por lo pronto no haya sido traducido al español, pero estamos seguros de que pronto lo será.


Aquí el poema en mención, agradecemos la traducción de Coll.

EXPLICÁNDOLE MI DEPRESIÓN A MI MADRE

Mamá, mi depresión se transforma Un día es tan pequeña como una luciérnaga en la palma de un oso al siguiente es el oso En esos días me hago la muerta hasta que me deja en paz.

Yo le llamo a los malos días “Días Oscuros” mamá me dice: intenta encender velas pero cuando veo una vela, miro el parpadeo de una flama destellos de una memoria más joven que el mediodía Estoy de pie junto a su ataúd abierto Es el momento en que aprendo que toda persona que conozca, un día morirá.

Además, mamá, no le tengo miedo a la oscuridad, tal vez eso sea parte del problema.


Mamá dice: pensé que el problema era que no podías salir de la cama No puedo, la ansiedad me tiene como un rehén dentro de mi casa, dentro de mi cabeza Mamá dice: ¿de dónde salió esa ansiedad?


Ansiedad es el primo que vino de visita a la ciudad y la depresión se sintió obligada a invitar a la fiesta Mamá, yo soy la fiesta, sólo que soy la fiesta en la que no quisiera estar

Mamá dice: ¿por qué no intentas ir a fiestas de verdad, ver a tus amigos? Claro que hago planes, hago planes aunque no quiero ir Hago planes porque sé que debería querer ir, sé que a veces me hubiera gustado ir Es sólo que no es tan divertido ir a divertirse cuando no te quieres divertir, mamá.


¿Sabes, mamá? Cada noche el insomnio me levanta en sus brazos y me deja en la cocina a la luz del horno El insomnio tiene esa forma romántica de convertir a la luna en la perfecta compañía Mamá dice: intenta contar borreguitos Pero mi mente sólo puede contar razones para permanecer despierta.


Así que salgo a caminar, pero mis rodillas tiemblan como brazos fuertes con muñecas frágiles que sostienen cucharas de plata Estas resuenan en mis oídos como campanas de iglesia que me recuerdan que estoy caminando dormida sobre un océano de felicidad en el que no puedo bautizarme.


Mamá dice: la felicidad es una decisión pero mi felicidad es tan hueca como un huevo agujereado Mi felicidad es una fiebre tan alta que va a estallar mamá dice que soy tan buena haciendo una tormenta en un vaso de agua y luego, de repente, me pregunta si tengo miedo a la muerte.

No, mamá, tengo miedo a vivir, mamá, estoy sola Creo que cuando papá se fue, aprendí a convertir la rabia en soledad y la soledad en mantenerme atareada así que cuando digo que he estado muy ocupada últimamente, quiero decir que me he quedado dormida en el sillón viendo Sports Center para evitar ver el vacío de mi cama.


Pero mi depresión siempre me arrastra de vuelta a mi cama hasta que mis huesos son fósiles olvidados de una ciudad cubierta de esqueletos mi boca es un cementerio de dientes rotos por morderse a sí mismos el auditorio vacío de mi pecho se desvanece con los ecos de un latido pero aquí, soy solamente una turista descuidada Nunca sabré en verdad dónde he estado.


Mamá sigue sin entender Mamá, ¿qué no ves? Tampoco yo puedo entenderlo.

Por: Anahí C. Rozas

Únete

y no te pierdas niguna actualización

Síguenos
  • Facebook Basic Square
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Categorías
bottom of page